6 de enero
No tengo un mango para llamar a los Reyes y decirles que te traigan un regalito. Vos no entendés todavía ni de Reyes ni de papás Noel ni de costumbres y demás justificaciones, así que no puedo decirte que estamos en contra del consumo y bla bla bla. Pero sí entendés de mi tristeza porque cada vez que me vez llorando me mirás con tus enormes ojosnegroscomolosmíos. Suficiente para que deje de llorar, te abrace y te diga y me crea que vamos a estar muy bien!!! Bueno, hijo, soy humana; quisiera ser la mejor, pero soy la que puedo y trato de ser mejor, pero a veces lloro y esto también es la vida que tanto! Ay de mi bebucho cuando me mirás a los ojos, si hasta grabé tu mirada tomando la teta; profundo, me mirás profundo como desde el fondo del tiempo, como si me quisieras decir Te acordás de mí?
Por suerte, el cinco a la noche vino la tía An o Tatá para vos, y me salvó la noche con un paquetito arriba de tus zapatillitas. Igual, yo me gasté la plata que me había dejado Papá Noel para que me compre una remera y llamé a los Reyes para que te traigan unos crayones para bebés: guardé tu primer dibujo... una rayita! La más hermosa de las rayitas.
En la casa de la Tía Mari y el tío Jor, los Reyes te dejaron unos bloques con un olor riquísimo, parecen de caramelo!
jueves, 6 de enero de 2011
Sola con un bebé 8
Publicado por
Karina
Etiquetas:
Maternidad,
Sola con un bebé
Enviar por correo electrónicoEscribe un blogCompartir en XCompartir con FacebookCompartir en Pinterest


Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario